Las navidades, unas fechas exquisitas
¡Hola amigos del Gourmet! Sabemos que las navidades son fechas de mucho ajetreo. Los regalos, los desplazamientos, las compras, vacaciones pero sobre todo las comidas y cenas. Hoy en el blog queremos contarte como combatir estas fechas exquisitas en lo gastronómico y a la vez cuidarnos un poco.
Las vacaciones siempre son un periodo de muchas distracciones, las navideñas aún más. En apenas veinte días tendremos varias comidas o cenas que pueden hacer que nos desviemos de nuestra dieta habitual. Esta relajación es totalmente normal y nadie debe sentirse culpable por comer más o diferente a lo que está acostumbrado. El sentimiento de culpa tiene a ser peor para nuestra salud que esas calorías de más.
Partiendo de esta última base, y sin auto crearnos una exigencia superlativa debido a estas reuniones casi diarias con familia, amigos, compañeros del trabajo o de cualquier otro vínculo social, desde el Gourmet si queremos dar unos consejitos, sociales que no dietéticos, para intentar sobrellevar las navidades.
Un anfitrión de lujo. Si tú organizas la velada, intenta ser creativo con el menú. Si bien los invitados aportan alimentos a la mis,a intenta estructurar la comida o cena, con variedad de alimentos para no concentrarlos todos en un tipo.
Las re-cenas. Una vez pasada la comida principal es común, la reorganización de otra quedada para rematar las sobras de la primera. Si conseguimos evitar este tipo de eventos, conseguiremos estar menos saturados de comida.
Comer no siempre es la solución. Que nadie se equivoque con esto, comer hay que comer. Lo que nosotros proponemos es que si tienes algún tipo de celebración con tu círculo, siempre se puede organizar algo ajeno a la comida para llevarlo a cabo. Ir a ver las luces de tu ciudad, patinar sobre hielo, o ir a ver exposiciones de belenes son también planes alternativos muy navideños.
No hay excusas. Desde aquí siempre vamos a recomendar la práctica de algún deporte para mejorar en nuestras condiciones. En Navidad es más importante aún sacar ese ratito para realizar el que más te guste, teniendo en cuenta que tenemos la agenda más ajustada. Como hemos dicho antes, el sentimiento de culpa no te va a hacer ningún bien.
Y poco más. Queremos hacer énfasis de nuevo en que esta entrada no está diseñada ni para prohibir ningún alimento, ni para que te sientas culpable, ni mucho menos para hacer de las navidades un calvario. Relájate y disfruta con los tuyos de esta fechas tan señaladas y que la comida no sea un problema.
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